Cumpleaños feliz...

El 21 de Agosto de 2009 emprendimos un largo viaje de casi una hora a una tienda de animales que nos gustaba mucho, porque tenían los animales muy bien cuidados. Al llegar había tres vitrinas llenas de cobayitos, todos ellos muy chiquitines. Empezamos a mirar y no sabíamos cuál elegir, todos eran muy bonitos.

Mi padre puso el dedo en el cristal de la tercera vitrina y un cobayito con la cabeza marrón se acercó. El único. Nos pareció super curioso, pero seguimos mirando. Y cuando volví de nuevo a esa vitrina y miraba, ahí lo vi, paseándose delante de mis ojos de un lado al otro, levantando bien altas las patitas, como luciéndose. Y dijimos:

¡ÉSE!

Compramos caja, heno, comida, comedero y ¡hala! vuelta a casa. Era TANNN PEQUEÑO... La caja parecía inmensa para él. Mi madre dijo que parecía más un hamster que un cobayo. Lo cierto, es que no pesaba más de 200 gramos. Era todo pelo, orejas y patas, pero las tenía grandes y se veía que iba a crecer. En realidad buscábamos un cobayo que fuera marrón del todo, pero no había ninguno. Éste tenía la cabeza marrón oscura, un collar blanco, el lomo marrón claro y el culo marrón oscuro (como un helado al corte, jeje), así que mantuvimos el nombre que habíamos pensado: CANELA. Pero, como era macho, se convirtió en CANELO. Y con el tiempo pasó como en todas las familias, se abrevió el nombre, hasta qudarse en NELO. También le llamamos Nelito, a veces, y mi madre Nel. Y ahora pesa un kilo más que cuando lo trajimos, jejeje.

¡¡¡ FELICIDADES NELO!!! Y QUE CUMPLAS MUCHOS MÁS. Te quiero mucho y eres uno más de la familia, mejor amigo que muchas personas y lo más bonito que tengo.

Si queréis felicitar a Nelo, podéis hacerlo dejando vuestro comentario y yo se lo diré. Por supuesto, ya le he cantado el "cumpleaños feliz" y le he dado un tironcito de orejas. A la tarde le voy a comprar algo de regalo, ya os contaré.